Los hallazgos que se publican en “A vista de pájaro: lecciones de 50 años de regulación y conservación del comercio de aves en los países amazónicos”, del autor Bernardo Ortiz-von Halle, brindan una descripción general del comercio de aves en Brasil, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú y Surinam, el recuento de su regulación y sus resultados como herramienta de conservación de especies y hábitats.
La comercialización de aves y sus productos desde la región data de muchos años: desde mediados del S. XIX se exportaron muchas toneladas de plumas y pieles de aves, sobretodo colibríes y tangaras, para el mercado de la moda. Esta demanda implicó la caza de millones de aves a lo largo de varias décadas. Por ejemplo, durante un breve período antes de la Primera Guerra Mundial, un comerciante de Londres importó 400,000 colibríes y otras 360,000 aves de Brasil, mientras en 1932, unos 25,000 colibríes fueron cazados en el estado de Pará (norte de Brasil) y enviados a Italia para adornar cajas de chocolate. Décadas después, desde mediados de los 1950 cuando se establecieron conexiones aéreas rutinarias (principalmente a través de Miami) y hasta la fecha, alrededor de un millón de aves fueron capturadas para ser exportadas como mascotas desde todos los países Sudamericanos.
El informe se realizó con el apoyo de TRAFFIC y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) por sus siglas en inglés.
Acceda al informe: https://www.traffic.org/es/publications/reports/birds-eye-view-es/