De la Amazonía a los glaciares y el agua que consumes

Quito, 20 de marzo, 2025. El pasado 18 de marzo, en conmemoración del Día Mundial del Agua 2025 y en el marco del Año Internacional de la Conservación de los Glaciares, la Fundación EcoCiencia, en colaboración con la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (FLACSO) y el Ministerio del Ambiente, Agua y Transición Ecológica (MAAETE), organizó el evento: “De la Amazonía a los Glaciares y el Agua que consumes”. Este evento, retransmitido por medios digitales, reunió a expertos y autoridades para discutir la interconexión entre los ecosistemas amazónicos, los glaciares andinos y la disponibilidad de agua.

En este encuentro se abordó además el impacto de la contaminación por microplásticos y metales pesados en las fuentes hídricas y las amenazas que esto enfrenta.   Entre los invitados estuvieron monitores del Plan de Monitoreo Ikiama Yapii de la Nacionalidad Achuar del Ecuador, científicas y representantes de la academia y el Ministerio del Ambiente.  

Tito Yanez, monitor del Plan de Ikiama Yapii, que en achuar significa “ la cara del bosque / del águila como cuidador”, explicó que este sistema está establecido en las provincia de Pastaza y Morona Santiago, en el Puerto Kupatas y Macuma, porque “porque hay bastante contaminación, en donde salen las vías, tanto para el medio ambiente como para los ríos también”.  Esta relación de ríos contaminados dio pauta para explicar la relación de contaminación de los glaciares durante las posteriores explicaciones.

Por su parte, Lizeth Sabando, consultora del proyecto de vulnerabilidad hídrica que lidera la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada RAISG y que ejecuta Fundación EcoCiencia en el Ecuador, señaló que la investigación evidencia la presencia de microplásticos en la cuenca  del río Napo a partir de la recolección de muestras, “existe una clasificación  gronulométrica con esta metodología …la mayoría de  ellas está en el río Papallacta en la  parte  alta … seguido por el río Coca en la parte baja y el río  Zuno y el Arajuno que son los cuatro  puntos rojos que podemos ver en el  mapa.”

La investigación señala que la presencia de estos microplásticos está asociada a factores como la presencia antropogénica es decir está cerca de una comunidad, “el río Coca tiene mucha población y por ende mucha presencia de basura entonces se presume que la contaminación es de la basura que se deposita directamente en este río”.

Julieth Chancay, investigadora de la Universidad Ikiam, con su exposición Microplásticos en glaciares andinos: ¿Un creciente peligro en el aire que respiramos?, señaló el preocupante registro de partículas plásticas pequeñas que podríamos estar consumiendo a través del agua. Chancay explicó cómo estás partículas plásticas, o microplásticos, que tienen un tamaño menor a 5 mm de longitud, son difíciles de ver, “estas se generan porque los  plásticos en el medio ambiente no se  degradan como la materia orgánica sino que se van fragmentando en  partículas más pequeñas, y  siguen ahí en el medio ambiente, realmente nunca  desaparecen”.

Uno de los aspectos más alarmantes del estudio es la presencia de microplásticos en sitios remotos como los glaciares, donde no hay una contaminación directa por actividad humana. La razón, según Chancay, es que estas partículas son extremadamente ligeras y pueden ser transportadas por el aire. “Los microplásticos tienen tamaños muy pequeños y densidades muy bajas, lo que les permite estar suspendidos en el aire que respiramos, incluso en este momento”, destacó.

Chancay explicó que los microplásticos, definidos como partículas plásticas menores a 5 mm de longitud, se originan por la fragmentación de plásticos en el medio ambiente. A diferencia de la materia orgánica, estos no se degradan, sino que se descomponen en partículas cada vez más pequeñas. “Los plásticos en el medio ambiente no se degradan como la materia orgánica, sino que se van fragmentando en partículas más pequeñas, y siguen ahí en el medio ambiente, realmente nunca desaparecen”, advirtió la investigadora.

Uno de los aspectos más alarmantes del estudio es la presencia de microplásticos en sitios remotos como los glaciares, donde no hay una contaminación directa por actividad humana. La razón, según Chancay, es que estas partículas son extremadamente ligeras y pueden ser transportadas por el aire. “Los microplásticos tienen tamaños muy pequeños y densidades muy bajas, lo que les permite estar suspendidos en el aire que respiramos, incluso en este momento”, destacó.

El impacto de los microplásticos en la salud y el medio ambiente es significativo. Diversos estudios los han vinculado con enfermedades como cáncer, problemas respiratorios, infecciones y necrosis celular. Además, su presencia en los glaciares podría afectar los procesos de deshielo, modificar la turbidez del agua y alterar los ecosistemas acuáticos.

Para su investigación, Chancay y su equipo extrajeron un núcleo de hielo de 8 metros de longitud a 5.520 metros de altura en el glaciar Antizana, en 2020. Tras un análisis exhaustivo en la Universidad Ikiam, se encontraron 1.760 partículas de microplásticos, de las cuales más de 1.000 eran fibras y más de 500 fragmentos. “Los microplásticos realmente están aumentando a través del tiempo. En nuestro estudio, encontramos un incremento del 5,84% por unidad de profundidad, lo que indica que su cantidad se ha triplicado en el transcurso de un año”, alertó la investigadora.

Juan Espinoza, coordinador técnico de MAP Biomas Agua, en Fundación EcoCiencia, presentó un análisis sobre la reducción de glaciares y cuerpos de agua en Ecuador, destacando la pérdida significativa de glaciares en la Cordillera Andina desde 1985, y Jorge Villa, coordindaor de MAAP en Fundación EcoCiencia presentó la problemática ambiental generada por la minería aluvial en la Amazonía, especialmente en los ríos de Ecuador, destacando su impacto en la contaminación del agua.

Pablo Cabrera, investigador de FLACSO, subrayó la grave situación de las aguas residuales a nivel mundial, destacando que solo el 20% son tratadas, y en América Latina el 70% se desecha sin tratamiento, afectando ríos y la salud urbana. Propuso soluciones como el uso de filtros biológicos, además de políticas públicas como impuestos al consumo de plásticos y la instalación de máquinas para promover el reciclaje. También resaltó la importancia de cambiar las prácticas urbanas y fomentar la reforestación. Por su parte, Daniel Borja, en representación del MAATE, habló sobre la necesidad de difundir la información que existe sobre los ecosistemas y áreas de protección hídrica en Ecuador.

La colaboración entre instituciones enfatiza el compromiso conjunto por fortalecer las capacidades locales en la gestión del agua y la conservación de los glaciares.?

Este webinar refleja el compromiso de la Fundación EcoCiencia con su misión de conservar la diversidad biológica y promover el uso sostenible de los recursos naturales. Al fomentar el diálogo y la cooperación entre diversos actores, EcoCiencia contribuye a impulsar prácticas que armonizan la relación entre el ser humano y la naturaleza, asegurando la disponibilidad de agua para las futuras generaciones.